MÁS ALLÁ DE LA COCINA DE SIEMPRE

Entretapas y vinos (Calle Salamanca, 13 - Zona Cánovas). Tel. 96 344 94 24. Lunes cerrado. Precio aproximado: 20 - 25 euros. Menú mediodía: 9 euros.

Hace más o menos un año y medio que abrió sus puertas. ENTRETAPAS Y VINOS entró con fuerza en el panorama gastronómico de la ciudad para romper desde la tradición. Su gerente, Carlos Alcaraz, tiene claro el mensaje que quiere transmitir. "Somos una taberna tradicional, pero con un toque innovador en la comida".

Con este grito de guerra, este restaurante se desmarcó del resto desde un principio. Bien pueden atestiguarlo quienes hayan ido ya a degustar las exquisitas tostas, las tablas, los postres o las sartenadas. Por hacer un resumen, ENTRETAPAS Y VINOS es una mezcla de buen comer y un diseño innovador y cuidado. Lo que más preocupa a sus encargados es la comodidad de sus clientes, para ello han diseñado un local con las máximas comodidades, rincones con intimidad, pero con la suficiente versatilidad como para albergar grandes comidas de grupo. "No tenemos problemas en preparar una mesa para treinta personas", explica Carlos. Todo eso se consigue con luces tenues en un ambiente donde gobierna la madera acompañada por el acero cepillado. Mezcla de diseño moderno, pero con un efecto cálido al mismo tiempo.

       Aunque lo más importante, como no podía ser de otro modo, es la comida. Una extensa carta variada dejará satisfecho al más exigente. ENTRETAPAS Y VINOS renueva lo que había sido los espacios de siempre donde se comía buena cocina española. Ofrece la oportunidad de seguir degustando lo mejor de nuestra gastronomía en un ambiente más moderno, más de nuestro tiempo. Unas diez variedades de tostas, donde reinan el jamón -la más clásica, sin duda, es la de jamón ibérico- y el solomillo con mezclas de quesos, las sartenadas y las tablas son las especialidades del local. Éstas últimas son el plato estrella, sobre todo en cenas de grupo. Tienen una gran variedad, se pueden elegir de carne, pescado y mixtas, según el número de comensales. Se trata de una tabla de madera en la que al plato principal se le acompaña con guarnición.

       En este año y medio también ha habido espacio para el cambio. ENTRETAPAS Y VINOS introduce ahora nuevos platos y renueva en un 80% su carta de vinos (en ella se encontrará los vinos de la tierra sin dejar de lado los clásicos de siempre). A los platos más tradicionales, los de toda la vida, se les añade una nueva perspectiva. Unos ejemplos. ¿El típico bacalao al pil pil? Dejará de ser tan típico, ya que le añade una confitura de tomate. ¿La pierna de cordero? El chef del restaurante la prepara con reducción de PX (Pedro Ximénez) y lo adereza con calabacín.

       Para los más pequeños hay un menú especial los fines de semana, para que no tengan que ceñirse únicamente a la carta.

Más información: www.entretapasyvinos.com


UNA PROPUESTA COLORISTA Y DE CALIDAD

Peperoncino es un restaurante italiano con propuestas muy apetitosas y accesibles para todo tipo de paladares y bolsillos. Con el mandamiento de ofrecer la máxima calidad en platos caseros a un precio lo más ajustado posible, este establecimiento con varios años de andadura cuenta con el aval de una clientela fiel. Ahora que el local ha sido reformado, la carta ampliada y la terraza reabierta, la experiencia Peperoncino es aún mejor, más intensa.

En Valencia, restaurantes italianos y pizzerías hay muchos. Sin embargo, no es tan habitual que la elaboración de estos populares platos se realice conforme a la tradición, de manera casera, y para colmo, con unos precios de lo más atractivos. Éstas son las cualidades que marcan la diferencia y convierten al Peperoncino en una parada obligada para una cena, de grupo o en pareja. El establecimiento, situado en la calle Maestro Gozalbo, número 29, esquina con la concurrida Avenida Reino de Valencia, ha sido reformado durante el verano "para, así, poder ofrecer un mejor servicio y que los clientes puedan venir con más tranquilidad", en palabras de Gianluca Binaghi, gerente de Peperoncino.

       Asimismo, desde el pasado mes de agosto la popular terraza de este restaurante ha sido reabierta y cualquiera que se acerque a este atractivo restaurante puede elegir entre degustar su apetitosa comida al aire libre, entre el bullicio de los que aman la buena vida, o en el interior, disfrutando del ambiente tranquilo y alegre que se respira gracias a la desenfadada decoración repleta de detalles. Los colores verde y naranja se conjugan con el metal y los tonos naturales para dar con un diseño sutil y acogedor que va a la perfección con el servicio, compuesto por jóvenes italianos -y un argentino- que se esfuerzan en todo momento por estar disponibles y atentos. Entre sus paredes, además, se pueden ver las diferentes exposiciones que se renuevan periódicamente.

        La interesante conjunción entre buena comida italiana y buen precio es una de las principales bazas por las que el Peperoncino se ha consolidado entre la amplia oferta de la zona. Todos los días se ofrece un menú diario que lo incluye todo (bebida, café y postre) al módico precio de 8'50 euros. Estos menús varían todos los días y cada semana se renuevan para que los habituales no se aburran. Por lo general, una cena o una comida eligiendo platos fuera del menú no va más allá de los 16 euros, más o menos, y siempre dependiendo de la bebida.

Además de las novedades en el local, el Peperoncino también ha renovado su carta, aumentando las posibilidades de elección a platos más innovadores e inesperados. Entre los grandes éxitos de este restaurante están los gnocchi, en cualquiera de sus variantes, los ravioli estivi con tomate fresco y pesto, las pizza búfala y avara, y los postres típicos como el tiramisú. La carta de vinos -que también se va a renovar en breve- se compone principalmente de caldos italianos y españoles asequibles a todos los bolsillos y paladares. Una propuesta interesante para cualquier día de la semana.


COCINA CREATIVA EN UN ENTORNO ÚNICO

El restaurante Saqarah propone una experiencia nueva para deleitarse con la mejor gastronomía. Locales que ofrecen una buena cocina hay muchos, pero no son tan abundantes los que marcan la diferencia cuidando a los clientes con un excelente servicio y un ambiente único. Un espacio para aquellos que saben disfrutar de la buena vida.

Con la expresión Buena comida, buena vida, los responsables del restaurante Saqarah definen a las claras su planteamiento: ofrecer a sus clientes un momento único a través de una gastronomía incuestionable en un espacio y un ambiente amigable y ecléctico donde todo el mundo puede encontrar su lugar. Porque este local situado en el poblado Marítimo de Valencia (en la calle Conserva, número 21. Cerca de la Ciudad de las Artes y las Ciencias y junto al Jardín de Ayora) quiere marcar la diferencia. Y para ello propone un nuevo espacio gastronómico y de ocio fuera de los circuitos habituales de marcha nocturna, porque se trata de un local ecléctico en su decoración, abierto a todo y a tod@s y con un espíritu urbano, cosmopolita y de vanguardia sin demasiados excesos.

       Para contribuir a todo ello se ha apostado por una ambientación de diseño pero acogedora y dinámica, en la que juegan un papel muy importante complementos como las proyecciones audiovisuales y la buena música que redondean el conjunto. En un espacio tan adecuado para cenas no se podía dejar de servir esas primeras copas que dan un toque especial a cualquier velada en buena compañía. Por eso, Saqarah es un lugar ideal para eventos y citas especiales, más aún para la celebración encuentros privados y fiestas de grupo, que encontrarán perfecto acomodo en sus dependencias. Un elemento esencial para que una experiencia así sea inolvidable es el contacto humano con el personal de sala. En este caso los profesionales encargados de la atención de primera mano al cliente, son jóvenes y dinámicos, y de tan generosos consiguen seducir a cada uno de los comensales.

       Sin embargo este restaurante está abierto a todo tipo de comidas, ya que abre de martes a sábado y cuenta, además, con menú de mediodía al módico coste de 10 euros. El resto de la semana el precio medio no va más allá de los 30 euros, ya que la carta de degustación por persona está a 20 euros. Los vinos siempre juegan un papel fundamental en toda buena comida, y conscientes de ello en Saqarah han apostado por una carta reducida pero muy bien seleccionada que facilita al cliente la elección.

       Pero, claro, en un restaurante que desee desmarcarse del resto no puede nunca descuidar el producto que ofrece, por eso en Saqarah se trabaja con las materias de más alto nivel. De esta manera consiguen entusiasmar a sus clientes con una cocina creativa y de fusión, basada en la manufactura y en la calidad. En fin, una cocina sin estridencias, honesta, sensata y muy acertada en concepto y precio.

Página web: www.saqarah.com